lunes, 17 de mayo de 2010

EXPERIENCIA DE GOBIERNO ELECTRONICO EN COREA DEL SUR

En materia de inversión, el gobierno coreano invirtió $5.000 millones en las TIC entre 1996 a 2001. Para 2004, Corea alcanza un alto porcentaje de casas conectadas a Internet de alta
velocidad (por encima del 70%), usuarios de comunicación móvil (superior al 72%), y el índice de difusión de las TIC (Lee 2003). Luego del desarrollo de la infraestructura tecnológica, de red y de comunicaciones, el gobierno coreano creó un Comité Especial de Gobierno Electrónico y delineó una Ley de Gobierno Electrónico a inicios de 2001.
En el marco de su estrategia de gobierno-e, este Comité destacó, en mayo de 2001, las tareas fundamentales (Sang et al., 2005):

1) Servicios innovadores públicos y de negocios:
- Servicios orientados al público a través de una interfaz simple.
- Enlace con los cuatro sistemas principales de información social e impuestos.
- Servicios de Cancelación de Impuestos en casa vía Internet.
- G2B: integración de los sistemas de procura.

2) Productividad y eficacia del gobierno-e:
- Sistema de gerencia integrado para la administración de las finanzas nacionales.
- Integración de los sistemas de información en los gobiernos regionales o locales.
- Sistema de información para la administración de la educación de alcance nacional.
- Sistema de administración de la política de personal.
- Intercambio digital de documentos del gobierno.

3) Construcción de una infraestructura para el gobierno-e:
- Desarrollo de un sistema de firmas y certificados digitales del gobierno.
- Consolidación de los centros y salas de computación del gobierno.

EXPERIENCIAS DE GOBIERNO ELECTRONICO EN VENEZUELA

Se pueden observar acciones concretas para apoyar las etapas del desarrollo del gobierno
electrónico en Venezuela en planes y acciones presentes en instrumentos como el Plan
Nacional de Tecnologías de Información (MCT, 2001b), la modernización del marco legal
asociado al uso de recursos electrónicos, la migración hacia nuevas plataformas
informáticas e incorporación de las TIC en procesos específicos de gestión de la
administración pública (Intranets y portales de gobierno, voto electrónico, cedulación y
pasaportes, impuestos, seguridad social, entre otros), proyectos de desarrollo y mejora de la
infraestructura tecnológica nacional para el acceso a redes de información y a redes de
conocimiento (Infocentros, Infopuntos, dotación de computadores al sector educativo, etc.),
formación de capital humano en Ciencia y Tecnologías, TIC y desarrollo de aplicaciones de
software (Misión Ciencia, Plan de Alfabetización Nacional, Academias de Software Libre,
asociación con Academia Cisco, Red Académica Reacciun2, etc.), creación de redes,
promoción de cooperativas y núcleos de desarrollo en Tecnologías de Información.
A nivel del gobierno, tres experiencias de gran impacto han sido la de CADIVI (Comisión
de Administración de Divisas), SENIAT (Servicio Nacional Integrado de Administración
Tributaria) y ONIDEX (Oficina Nacional de Identificación y Extranjería), las cuales han
permitido la gestión de sus procesos respectivos a través de Internet. Otros entes del
gobierno, si bien han avanzado en la automatización de parte de sus procesos con
resultados excelentes (por ejemplo, solicitud de licencias de conducir) aún deben transitar u
trecho para alcanzar la integración y automatización de todo el proceso.
Como un logro a destacar, orientado a la implantación de la democracia electrónica, se
puede resaltar la automatización del sistema de votación en el país. En América Latina, han
avanzado en ese sentido Brasil y Venezuela.

DESVENTAJAS

Hemos definido cuales son las ventajas que promete la aplicación del gobierno electrónico.
Ahora, es necesario establecer cuales son algunos de los puntos negativos y obstáculos que
tendrían las practicas del gobierno electrónico, para tener un mejor panorama de esta nueva
herramienta. Al hablar de desventajas, es necesario aclarar, que con una buena aplicación de una plataforma de gobierno electrónico, algunas de las desventajas enumeradas en este apartado, podrían evitarse. Algunos de los posibles obstáculos para instaurar el gobierno electrónico son:

-Deficiencia en la infraestructura tecnológica y física para la instauración de un gobierno en Línea: Uno de los problemas importantes en la implementación del gobierno electrónico, es el
problema técnico. Es necesario hacer decisiones asertivas sobre que tipo de tecnología utilizar, así como definir estratégicamente las mejores opciones desde el punto de vista técnico. Sin embargo, es necesario recordar, que el problema fundamental a la hora de implementar gobierno electrónico, es contar con la voluntad política necesaria, para luego enfocarse en el problema de infraestructura y tecnología necesarias dentro de la administración.
-Inestabilidad política y recesión económica:
La implementación del gobierno electrónico es un proyecto de largo plazo, y necesita de
estabilidad política y continuidad para tener éxito. Los efectos y alcances que pueda tener
una estrategia de gobierno electrónico, a través de planes como una agenda de conectividad
nacional, necesitan como factores indispensables: la estabilidad política y económica, de lo
contrario, no será posible implementar correctamente una plataforma eficiente, o bien, se
implementarán programas parcial o deficientemente.

-Existencia de una mayoría de ciudadanos analfabetas tecnológicos.
Es necesario además de ampliar el acceso a Internet y otras redes telemáticas, lograr
alfabetizar digitalmente a la población de la región. En Latinoamérica, al menos un 80% de
la población necesita ser alfabetizada digitalmente. Alrededor de 60% de los territorios
latinoamericanos nunca han tenido una computadora. Por ello es absolutamente necesario que el Estado procure la alfabetización tecnológica de los administrados.

-Falta de coordinación y comunicación entre los diferentes organismos gubernamentales.

-Abuso de poder por parte de la administración pública.

VENTAJAS

CIUDADANOS
Mayor amplitud de canales, disminución de costos de operación, servicios más ágiles y personalizados, mayor participación ciudadana.

EMPRESAS
Interacciones más rápidas, disminución de costos de operación, disminución y/o eliminación de aspectos normativos.
INSTITUCIONES PUBLICAS
Mayor rapidez y eficiencia, disminución de costos de operación, mejor utilización de inversiones tecnológicas.

CLASIFICACION

El primer índice concebido para clasificar de manera global el acceso a las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) en el mundo ha deparado algunas sorpresas.
Así, por ejemplo, Eslovenia se iguala con Francia y el cuarto lugar es ocupado por la República de Corea, que normalmente no figuraba entre los diez primeros países en las clasificaciones internacionales sobre las TIC.Aparte de Canadá, clasificada en décimo lugar, hay que señalar que en este sentido las primeras diez economías son exclusivamente asiáticas y europeas.
El índice de acceso digital (IAD) se distingue de otros indicadores por incluir una serie de nuevas variables, tales como la educación y la asequibilidad.
Asimismo, abarca un total de 178 países, lo que lo convierte en el primer indicador TIC realmente mundial.Los países se clasifican en una de las cuatro siguientes categorías de acceso digital: elevado, medio alto, medio bajo y bajo.
En la categoría media alta figuran principalmente naciones de Europa Central y Oriental, el Caribe, los Estados Árabes y los países latinoamericanos con economías emergentes.Muchos de estos países han utilizado las TIC como motor del desarrollo y sus políticas gubernamentales los han ayudado a llegar a un nivel impresionante de acceso TIC.
En este contexto, hay que citar destacadamente importantes proyectos TIC como la Ciudad Internet de Dubai en los Emiratos Árabes Unidos (país árabe mejor puntuado por el IAD), el Supercorredor Multimedios de Malasia (nación asiática con la mayor puntuación) y la Ciudad Cibernética de Mauricio, que junto con Seychelles, fue el país mejor puntuado en África.
El IAD será una herramienta muy útil para seguir los progresos que se realicen en el futuro en estos ambiciosos países con economías incipientes.
Nivel Informativo
Es la primera fase de gobernabilidad electrónica y significa estar presente en las redes telemáticas, proporcionando al público externo (Gobierno-Ciudadano y Gobierno-Empresa) información relevante. El formato del primer sitio web de gobierno es similar a los de un folleto u hoja impresa.
En primera instancia, se encuentra la etapa de presentación de información, en la cual, las diferentes agencias gubernamentales ofrecen información sobre sí mismas a través de la red al público en general. Esto coincide con el primer nivel de interacción en la escala que propone, Jensen, (1993), como nivel "selectivo" en el cual el usuario puede interactuar eligiendo entre una serie de opciones de una "corriente" unidireccional y constante de información.
Nivel de interactividad
En una segunda etapa la comunicación se torna bidireccional, permitiendo al público usuario remitir vía electrónica información propia. La idea es que en los tres tipos de interacción esenciales a la gobernabilidad (Gobierno-Comunidad, Gobierno-Empresas y Gobierno-Gobierno), el gobierno podrá hacer más con menos y, al mismo tiempo, fortalecerá la comunicación directa con los ciudadanos, eliminando la intermediación que normalmente efectuaban las burocráticas oficinas gubernamentales. Para el caso del gobierno electrónico, el término "interactividad" representa el rescate de los productos y servicios del gobierno, intercambio de información, comunicación.
En la clasificación de Jensen (1993) esta etapa se correspondería con el nivel de interacción "conversacional": el usuario puede generar contenido. Al generar contenido agrega su información al sistema y comienza a participar afectando con nueva información las bases de datos del gobierno. Su información, en forma de planillas, correo electrónico, consultas en línea, es tomada en cuenta para generar nueva información y para la toma de decisiones del gobierno.

Nivel de transacción
Con la tercera etapa la complejidad de la tecnología se incrementa, pero la valoración del cliente (ciudadanía y sector privado) también aumenta. La completación de transacciones puede ser hecha sin tener que acudir a una oficina.
En esta fase, los procesos internos han de ser rediseñados para proveer un buen servicio.
El gobierno necesita crear nuevas leyes y legislación que validen la transacción de papeles con certificación legal. En esta etapa completar los procesos en línea, incluye pagos, firma digital, etc. Esto ahorra tiempo, papel y dinero.
En la tercera etapa se permite un intercambio más efectivo entre el gobierno y los administrados, permitiendo por ejemplo, el pago de una tasa administrativa o la obtención de un certificado vía electrónica.

Nivel de transformación
La cuarta fase es la fase de transformación, fase en la cual todo sistema de información estará integrado y el público (Ciudadanía y Sector privado) puede utilizar los servicios en una oficina de atención virtual desde cualquier lugar de conexión. Un sitio único de ingreso para todos los servicios es la última meta.
El mayor obstáculo para alcanzar esta meta se encuentra principalmente del lado interno del gobierno. Por ejemplo, la necesidad drástica del cambio de cultura, procesos y responsabilidades dentro de la institución gubernamental (Gobierno-gobierno). Los empelados gubernamentales en sus diferentes departamentos deben trabajar juntos de una forma uniforme y sin divisiones. En esta fase el ahorro de costos, la eficiencia y satisfacción del usuario alcanzan los niveles más altos.
En la cuarta y última etapa todos los servicios gubernamentales son integrados en un solo portal el cual reúne condiciones de funcionalidad y facilita información en forma completa sobre el gobierno.
Esta etapa de desarrollo del gobierno electrónico debe hacer posible que se alcance el mayor nivel de interactividad entre los ciudadanos y el gobierno. Este nivel implica una apropiación completa por parte de las comunidades de la herramienta tecnológica para la consecución de sus objetivos de participación ciudadana, donde los usuarios del sitio de gobierno electrónico logren, no sólo incidir en las políticas y decisiones que lo afecten, si no que sea capaz de transformar al gobierno mismo a través de propuestas que provengan de los ciudadanos. Este es la verdadera etapa transformacional del gobierno electrónico, que pudiera equipararse con el nivel "de registro" de Jensen (1993), donde el sitio se adapta al usuario y produce contenidos personalizados para él. Es el nivel de máxima comunicación y de mayor satisfacción de sus necesidades, fin último de todo "buen gobierno", velar ante todo por el bienestar de los ciudadanos.
El transcurso de estas etapas supone un trabajo arduo el cual deberá ser acometido con el debido respaldo, es decir con el aporte de conocimientos sobre la nueva tecnología y la forma de prestar servicios a través de Internet, por parte de expertos en la materia pero que además no será posible sin la voluntad política del gobierno de asumir al "gobierno electrónico" como una estrategia de evolución y perfeccionamiento de la democracia.

Definicion de gobierno electronico

Algunos consideran que el gobierno electrónico o, en inglés: electronic government, e-government o simplemente, e-gov se constituye en una herramienta novedosa para garantizar la viabilidad del proceso de reforma. Pero la noción de gobierno electrónico comporta la revisión de un conjunto de definiciones y de hechos históricos, indispensables para la comprensión del mismo. No puede olvidarse que el gobierno como elemento existencial del Estado es dinámico y está influenciado por los acontecimientos surgidos en el devenir de los tiempos y de las circunstancias; y una importante revolución es la que han producido el desarrollo de las TIC, especialmente la Internet. Partiendo de estas consideraciones, revisemos algunas definiciones:
Para Gartner Group. "E-gov ... es una innovación continua de los servicios, la participación de los ciudadanos y la forma de gobernar mediante la transformación de las relaciones externas e internas a través de la tecnología, el Internet y los nuevos medios de comunicación (Abraham, 2001)
Otros como Castoldi (2002: 112), consideran que el concepto “incluye todas aquellas actividades basadas en las modernas tecnologías informáticas, en particular Internet, que el Estado desarrolla para aumentar la eficiencia de la gestión pública, mejorar los servicios ofrecidos a los ciudadanos y proveer a las acciones del gobierno de un marco mucho más transparente que el actual”.
Así, hay quienes lo conciben como un esquema de gestión pública basado en la utilización de la tecnología de la información y de las comunicaciones, teniendo como objetivos mediatos optimizar la gestión pública y desarrollar un enfoque de gobierno centrado en el ciudadano ( Ocampo, 2003:2)
En Latinoamerica, se ha indicado, por parte del sector gubernamental, que el gobierno electrónico es una decisión estratégica de las naciones ante la transformación de la sociedad industrial en una sociedad basada en el conocimiento, en donde prevalecen como objetivos primordiales la nueva forma de gobernar incrementando la eficiencia y transparencia de la gestión, un trabajo de integración: integrar la tricotomía Estado-Empresa-Ciudadano, un cambio radical en los procesos y la cultura organizacional y el ciclo de optimización y desarrollo creciente.
Finalmente, puede decirse que el gobierno electrónico implica la reestructuración de los servicios públicos, una fuerte inversión (humana, presupuestaria y en equipos tecnológicos de información y comunicación) de los organismos administrativos a todos los niveles, así como un cambio cultural, lo cual es un factor calve para el éxito de la instauración de un gobierno electrónico. Sin embargo, no significa que automatizar o instalar software y hardware adecuados por doquier, tanto al interior de las administración pública, lo que se conoce como comunicación Intranet , como la conexión con los ciudadanos a través de la web, sea suficiente para hablar de e-gov. Será necesario que se permita una autentica exposición de criterios, soluciones y deliberaciones en torno a la realidad social, económica, jurídica y política de un país, para que pueda iniciarse una relación gobierno/administrado transparente y eficiente.
En cuanto a los planes y políticas, mientras los países desarrollados se hallan claramente en una espiral vertiginosa de adquisición y aplicación de conocimientos y de transformación del ejercicio del gobierno, los países en desarrollo, especialmente, los países de América Latina hacen frente a enormes obstáculos, entre otros, la compra y el despliegue de las TIC, por otra parte sus débiles democracias, con líderes con poca o nula voluntad para impulsar el proceso modernizador orientado al uso de las TIC, necesario para implantar esta forma de gestión pública; además existe un mínimo de participación ciudadana, todo lo cual hace utópico en la realidad tal innovación administrativa. La mayoría de estos Programas no cuentan con la utilización del pensamiento estratégico en función del gobierno electrónico, por cuanto la mayoría de los niveles de la Administración Pública, no reportan política, planes o proyectos de actualización informática orientada al e-gov. Sin embargo, la mayoría coinciden en que, al menos en teoría, los Estados deben dar el ejemplo y el primer paso hacia su propia modernización mediante la introducción y uso masivo de las TIC, para la automatización de sus procesos, prestar sus servicios en línea, implantar la comunicación intra e intergubernamental, y con la sociedad, promover los mercados en la nueva economía digital mediante un adecuado marco jurídico, establecer mecanismos de fomento que permitan la difusión de las TIC en las Pequeñas y Medianas Empresas (PYME´S) y la generación de nuevos emprendedores en la WEB; finalmente, y no menos importante, se expone promover la formación de recursos humanos en el sector productivo para el manejo y uso de las TIC. Y es que estos programas deben procurar ser facilitadores en la transición hacia una sociedad de la información o infosociedad y la nueva economía o economía digital.