lunes, 17 de mayo de 2010

CLASIFICACION

El primer índice concebido para clasificar de manera global el acceso a las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) en el mundo ha deparado algunas sorpresas.
Así, por ejemplo, Eslovenia se iguala con Francia y el cuarto lugar es ocupado por la República de Corea, que normalmente no figuraba entre los diez primeros países en las clasificaciones internacionales sobre las TIC.Aparte de Canadá, clasificada en décimo lugar, hay que señalar que en este sentido las primeras diez economías son exclusivamente asiáticas y europeas.
El índice de acceso digital (IAD) se distingue de otros indicadores por incluir una serie de nuevas variables, tales como la educación y la asequibilidad.
Asimismo, abarca un total de 178 países, lo que lo convierte en el primer indicador TIC realmente mundial.Los países se clasifican en una de las cuatro siguientes categorías de acceso digital: elevado, medio alto, medio bajo y bajo.
En la categoría media alta figuran principalmente naciones de Europa Central y Oriental, el Caribe, los Estados Árabes y los países latinoamericanos con economías emergentes.Muchos de estos países han utilizado las TIC como motor del desarrollo y sus políticas gubernamentales los han ayudado a llegar a un nivel impresionante de acceso TIC.
En este contexto, hay que citar destacadamente importantes proyectos TIC como la Ciudad Internet de Dubai en los Emiratos Árabes Unidos (país árabe mejor puntuado por el IAD), el Supercorredor Multimedios de Malasia (nación asiática con la mayor puntuación) y la Ciudad Cibernética de Mauricio, que junto con Seychelles, fue el país mejor puntuado en África.
El IAD será una herramienta muy útil para seguir los progresos que se realicen en el futuro en estos ambiciosos países con economías incipientes.
Nivel Informativo
Es la primera fase de gobernabilidad electrónica y significa estar presente en las redes telemáticas, proporcionando al público externo (Gobierno-Ciudadano y Gobierno-Empresa) información relevante. El formato del primer sitio web de gobierno es similar a los de un folleto u hoja impresa.
En primera instancia, se encuentra la etapa de presentación de información, en la cual, las diferentes agencias gubernamentales ofrecen información sobre sí mismas a través de la red al público en general. Esto coincide con el primer nivel de interacción en la escala que propone, Jensen, (1993), como nivel "selectivo" en el cual el usuario puede interactuar eligiendo entre una serie de opciones de una "corriente" unidireccional y constante de información.
Nivel de interactividad
En una segunda etapa la comunicación se torna bidireccional, permitiendo al público usuario remitir vía electrónica información propia. La idea es que en los tres tipos de interacción esenciales a la gobernabilidad (Gobierno-Comunidad, Gobierno-Empresas y Gobierno-Gobierno), el gobierno podrá hacer más con menos y, al mismo tiempo, fortalecerá la comunicación directa con los ciudadanos, eliminando la intermediación que normalmente efectuaban las burocráticas oficinas gubernamentales. Para el caso del gobierno electrónico, el término "interactividad" representa el rescate de los productos y servicios del gobierno, intercambio de información, comunicación.
En la clasificación de Jensen (1993) esta etapa se correspondería con el nivel de interacción "conversacional": el usuario puede generar contenido. Al generar contenido agrega su información al sistema y comienza a participar afectando con nueva información las bases de datos del gobierno. Su información, en forma de planillas, correo electrónico, consultas en línea, es tomada en cuenta para generar nueva información y para la toma de decisiones del gobierno.

Nivel de transacción
Con la tercera etapa la complejidad de la tecnología se incrementa, pero la valoración del cliente (ciudadanía y sector privado) también aumenta. La completación de transacciones puede ser hecha sin tener que acudir a una oficina.
En esta fase, los procesos internos han de ser rediseñados para proveer un buen servicio.
El gobierno necesita crear nuevas leyes y legislación que validen la transacción de papeles con certificación legal. En esta etapa completar los procesos en línea, incluye pagos, firma digital, etc. Esto ahorra tiempo, papel y dinero.
En la tercera etapa se permite un intercambio más efectivo entre el gobierno y los administrados, permitiendo por ejemplo, el pago de una tasa administrativa o la obtención de un certificado vía electrónica.

Nivel de transformación
La cuarta fase es la fase de transformación, fase en la cual todo sistema de información estará integrado y el público (Ciudadanía y Sector privado) puede utilizar los servicios en una oficina de atención virtual desde cualquier lugar de conexión. Un sitio único de ingreso para todos los servicios es la última meta.
El mayor obstáculo para alcanzar esta meta se encuentra principalmente del lado interno del gobierno. Por ejemplo, la necesidad drástica del cambio de cultura, procesos y responsabilidades dentro de la institución gubernamental (Gobierno-gobierno). Los empelados gubernamentales en sus diferentes departamentos deben trabajar juntos de una forma uniforme y sin divisiones. En esta fase el ahorro de costos, la eficiencia y satisfacción del usuario alcanzan los niveles más altos.
En la cuarta y última etapa todos los servicios gubernamentales son integrados en un solo portal el cual reúne condiciones de funcionalidad y facilita información en forma completa sobre el gobierno.
Esta etapa de desarrollo del gobierno electrónico debe hacer posible que se alcance el mayor nivel de interactividad entre los ciudadanos y el gobierno. Este nivel implica una apropiación completa por parte de las comunidades de la herramienta tecnológica para la consecución de sus objetivos de participación ciudadana, donde los usuarios del sitio de gobierno electrónico logren, no sólo incidir en las políticas y decisiones que lo afecten, si no que sea capaz de transformar al gobierno mismo a través de propuestas que provengan de los ciudadanos. Este es la verdadera etapa transformacional del gobierno electrónico, que pudiera equipararse con el nivel "de registro" de Jensen (1993), donde el sitio se adapta al usuario y produce contenidos personalizados para él. Es el nivel de máxima comunicación y de mayor satisfacción de sus necesidades, fin último de todo "buen gobierno", velar ante todo por el bienestar de los ciudadanos.
El transcurso de estas etapas supone un trabajo arduo el cual deberá ser acometido con el debido respaldo, es decir con el aporte de conocimientos sobre la nueva tecnología y la forma de prestar servicios a través de Internet, por parte de expertos en la materia pero que además no será posible sin la voluntad política del gobierno de asumir al "gobierno electrónico" como una estrategia de evolución y perfeccionamiento de la democracia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario